Cuentos para niños perversos

Huilo Ruales Hualca
No sólo que milita contra la literatura solemne y empastada de todos los tiempos, sino que se niega a adoptar el estilo neutro que impone la globalización. Inventa una escritura para reproducir el habla de los personajes urbano-marginales, su pronunciación, sintaxis y fraseo, tal cual lo hicieran los narradores de la llamada Generación del 30 con el habla del indio y el montubio, pero desde la picaresca, con un humor tan corrosivo con el de «la risa de las puertas de hierro» (para usar una lograda metáfora suya). Ahora vive en Paris, fresco con un pato à l’orange.